martes, 6 de septiembre de 2011

GEOGRAFÍA CRECIENTE

Este bello monte creciente de suaves laderas
guarda dentro una silente gruta secreta
donde un pequeño coloso durmiente
crece con pulso firme y sereno;
cuyo corazón ruge como un príncipe león
sediento de sentir la luz,
ansioso de correr la selva.

Esta preciosa roca creciente de ovaladas aristas
atesora una oculta geoda centelleante
de aguas puras, calmas y tersas,
auténtico don de vida y paz,
donde se despereza un minúsculo titán
hambriento de andar la tierra,
deseoso de acrecer su fuerza.

Este hermoso volcán creciente de cima soberbia
esconde una caldera de materno magma,
cuyo calor día y noche nutre
y da hechura humana a un gigante,
gigante de finas y delicadas formas
anhelante de extrañas sensaciones,
ávido de experimentar su existencia.

Este coloso, este titán, este gigante
tendrá una aurora boreal por cuna,
que mecerá el viento con su frescura.

Y descansará en los brazos de las olas,
protectoras de su sueño en cada instante,
arrullado por el susurro eterno del mar.

Y sus ojos se empaparán de una realidad
que le espera paciente en cada ser vivo,
en cada árbol, cada piedra, cada hombre.


(A Sara y Mª Ángeles,
por ser gruta, geoda y caldera de dos nuevas vidas).